Scorsese se inspiró en el libro de Brian Selznick "La invención de Hugo Cabret" y éste a su vez en una película: "Recuerdo haber visto 'Viaje a la Luna', la asombrosa película de Georges Méliès de 1902, y el cohete que se estrellaba contra el ojo de la cara dibujada en la Luna se grabó firmemente en mi imaginación. Quería escribir una historia acerca de un chico que conoce a Méliès, pero no sabía cuál podría ser la trama. Pasaron unos años. Hasta que en 2003, llegó a mis manos un libro titulado 'Edison's Eve', de Gaby Wood. Es una historia sobre autómatas, y para sorpresa mía, uno de los capítulos era sobre Méliès". "La invención de Hugo Cabret (Una novela en palabras e imágenes)" ganó el premio Caldecott Medal de 2008, otorgado por la Association of Library Service to Children al libro ilustrado para niños más destacado. Llegó al número uno de la lista de los más vendidos del New York Times, y quedó finalista del Premio Nacional de Novela de Estados Unidos.
La historia: París, años 30. Hugo Cabret, personaje con rasgos dickenianos, es un niño de 12 años huérfano que vive escondido en la estación de tren Gare Montparnasse. El muchacho pasa los días ajustando los relojes de la estación, robando alimento para sobrevivir y trabajando en el proyecto más ambicioso de su difunto padre: la reparación de un autómata estropeado, un hombre mecánico supuestamente capaz de escribir con un pluma estilográfica. Si quiere sobrevivir, nadie debe saber de su existencia. Sin embargo, un día tiene un descuido y es descubierto por una excéntrica chica, amante de los libros, y por un viejo y amargado juguetero. Y ya nada será como antes. Un críptico dibujo, un valioso cuaderno de notas, una llave robada, un autómata y un mensaje oculto del difunto padre de Hugo son algunas de las claves de un intrincado misterio, que sorprendentemente nos va a llevar a otra historia mágica: la de los orígenes del cine, en concreto a la figura de Georges Méliès -el tutor de la niña amante de los libros-, el gran mago del cine, el abuelo de los efectos especiales y la ciencia ficción. Autor de "Le Voyage dans la Lune", una pequeña joya del cine basada en la obra de otro genio: "De la Tierra a la Luna", de Jules Verne.
Pero además hay otros guiños al cine como la inclusión de "Un tren llegando a la estación", una de las primeras proyecciones públicas de los hermanos Lumière en París en 1895, donde los espectadores se levantaban asustados del asiento, ante el realismo de las imágenes, por miedo a que la locomotora les arrollase. O la escena donde Hugo se cuelga de las manillas del reloj, referente claro a Harold Joyce.
En definitiva, una película y una novela llenas de amor al cine y la literatura, y que nos invita a indagar en la figura de Georges Méliès y los orígenes del cine, en el mundo de los autómatas, así como a la lectura o relectura del mismo Julio Verne.